De El CEIP Atalaya Atarfe (Granada), los profesores José Alberto Martín, Esther Diánez y Alicia López comparten la experiencia ‘Construyendo Ambientes Cooperativos Inclusivos’, un proyecto de ambientes cooperativos inclusivos en el que un grupo de más de 30 alumnos se manejan de tal manera que las matemáticas son un aliado y gracias a las piezas de LEGO, no es tu enemigo más temido.
Hace unos años escuché un término (Diseño de aprendizaje universal), que reflejaba la siguiente idea en su lema: “No hay estudiantes ni minusválidos, sino entornos desactivadores”. Este lema más o menos llamativo esconde el valor real del concepto de escuela, que no es más que un espacio en el que los alumnos se desarrollan, crecen, alcanzan la mayoría de edad … todo en armonía con sus compañeros y dentro de la diversidad que encontrarán. . en la sociedad a la que pertenece y en la que debe participar en su totalidad.
Pero, ¿qué hace la escuela por ello? ¿La escuela es una sala de activación o desactivación? En esta reflexión se encuentra nuestro proyecto: “Construyendo entornos cooperativos integradores”.
Cómo se construyen los entornos colaborativos integradores
Al comienzo del curso iniciamos un proyecto de competencia matemática donde los estudiantes asumieron la motivación de conocerlo, relacionado con su vida diaria y materializado en el Diseño y creación de personajes (superhéroes) que han ayudado a los niños a resolver problemas que tienen un claro componente matemático.. En una de las asignaciones experimentales, usamos el kit LEGO “+ Math” para esbozar el guión gráfico de los capítulos que los estudiantes querían registrar para crear su producto final.
Al completar esta tarea, un grupo de ellos notó que esta actividad sería muy interesante para explicar las matemáticas al resto de los estudiantes (por ejemplo, sus hermanos) y a los estudiantes. Incluso se pusieron en contacto con la profesora de pedagogía terapéutica (PT, Alicia López) para ver si les puede ser de utilidad a los niños que los acompañan ocasionalmente.
Fuera del debate entre todos, lanzamos el taller “Construyendo Ambientes Cooperativos Inclusivos”‘, En este grupo, se organizó una clase grupal (acostumbrada a trabajar en colaboración y en base a proyectos) en seis grupos para diseñar actividades que explicaran las matemáticas usando piezas de LEGO.. El resultado final fue un Ambiente maravillosamente variado en el que alrededor de 40 estudiantes trabajaron hacia el mismo objetivo.: Afronta los retos matemáticos de tu día a día: según el caso como coordinador, secretario, gestor de materiales, armonizador, gestor de tiempos y / o aglutinador de tareas.
Ayuda entre compañeros
La peculiaridad de esta propuesta se centró en la implicación de la profesora de EF y sus alumnos, que se sumaron prontamente a la propia actividad del proyecto: alumnos altamente cualificados se incorporaron al trabajo de cada grupo y encontraron un espacio desde el que desarrollar sus inquietudes y un alumnado cercano a su plan de estudios. Del mismo modo, Los estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo han encontrado un espacio diverso e inclusivo en grupos cooperativos que les ha permitido conocer y comprender los aspectos del currículo que aún no han alcanzado..
Durante la sesión de trabajo cooperativo semanal, alrededor de 40 estudiantes se concentran en la lección y acceden al plan de estudios desde una perspectiva integradora.. Todos participan en la tarea planificada desde su rol y así pueden experimentar las matemáticas y compartir su comprensión con otros compañeros. En el aula, varios profesores nos coordinaron, ayudaron y guiaron a los alumnos para lograr la tarea propuesta, creando así una personalización del aprendizaje en grupos cooperativos. A lo largo de la propuesta, la evaluaremos a partir de una variedad de fuentes. El primero desde el enfoque de satisfacción a medida que los estudiantes ingresan al aula para unirse a la propuesta y al grupo al que se integran. Además, los niños entendieron que la mejor manera de aprender matemáticas es manipular los conocimientos y llevarlos a su vida diaria, y que la satisfacción con la actividad es alta.
La profesora de PT, por su parte, está muy contenta con el desarrollo de la actividad ya que puede trabajar con los alumnos que visitan su aula desde un espacio inclusivo sin dogmatizar ni etiquetar a ninguno de ellos. Ha visto un aumento en la motivación para comprender las matemáticas y esto lo ayuda a mejorar el conocimiento y el aprendizaje de los estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo.