Hace cinco años los profesores de música del Colegio Salesiano de Las Palmas de Gran Canaria Hemos decidido realizar un gran proyecto: un Agrupación instrumental formada por alumnos de diferentes edades y niveles.e introducirlos en la práctica musical desde una perspectiva globalizadora e integradora. Desde un principio teníamos claro que la formación musical que más se adaptaba a las necesidades del centro era la batucada. Pero queríamos ir más lejos.
¿Qué instrumentos tenemos?
Como resultado de esta pregunta, la idea de Reciclar nuestros propios instrumentos musicales. Y nos pusimos manos a la obra. Durante unas semanas recolectamos las latas, bidones y jarras que las familias traían a la escuela.
Los alumnos se encargaron de pintar los instrumentos musicales a partir de material reciclado, lo que generó grandes expectativas ya que el resto de alumnos y profesores nos miraban con preocupación en un principio. ¡Trabajamos con utensilios que deberían estar en la basura!
Identificación y distribución de tonos
Uno de los pasos básicos, y en el que nos detuvimos la mayor parte del tiempo, fue estudiar los diferentes ruidos que podían producirse. de material reciclado recolectado. Según sus dimensiones, su material o su tipo de percusión, se dividieron en los distintos subgrupos o secciones instrumentales de una Batucada.
El siguiente paso fue asignar a los estudiantes los instrumentos de percusión. Cabe señalar que los alumnos que componen el proyecto eran más jóvenes entre 7 y 18 años. Por lo tanto, los voluminosos instrumentos se entregaron a los escolares mayores.
Primer intento
Después de varias semanas de preparación, comenzaron los experimentos. Durante las primeras sesiones, los alumnos se dedicaron a conocer instrumentos musicales fabricados con material reciclado y experimentar su sonido de forma individual. Descubra la forma correcta de uso, manipulación, ubicación y cuidado, entre otros.
Los métodos de interiorización de los distintos esquemas rítmicos fueron variados, aunque enfatizamos el uso del movimiento y la voz para lograr el objetivo final: interpretar y desarrollar juntos diferentes ritmos de batucada. Las iniciales eran sencillas y reconocibles, pero a medida que pasaban las sesiones de prueba Los estudiantes pidieron más dificultades musicales., más desafíos. En definitiva, y casi sin darnos cuenta, habíamos logrado el logro más importante: la motivación de los alumnos.
Exposición y desarrollo
La presentación pública de la formación musical fue todo un éxito. Tanto los miembros del colegio como los familiares quedaron sorprendidos por la puesta en escena y ejecución de diferentes ritmos de cierta complejidad que tocaba la batucada.
En palabras del profesor de música Montserrat Sanuy, “un niño musicalmente activo es un niño alerta, animado, adaptado y feliz”. Y vemos que cada vez hay un ensayo o representación de la batucada de la escuela. Observamos a niños y jóvenes interpretando ritmos a través de ejercicios de grupo musical en un clima de respeto, cooperación y diversión.
Actualmente, la Batucada sigue creciendo, y continúan los ensayos y actuaciones de instrumentos musicales hechos con material reciclado tanto en eventos escolares como en varios eventos fuera de la Batucada. Participación en el carnaval de Las Palmas de Gran Canaria.