Hoy vamos a hablar de un gráfico de arbustos que nos dará una nueva renovación de colores en otoño. Se trata de Euonymus alatus. Entre sus nombres comunes encontramos capucha alada, huso alado y zarza ardiente. Sus nombres se deben principalmente al fuerte color de las hojas. Es perfecto para la decoración de jardines, le da un toque exótico y es muy apreciado por la comunidad de jardineros.
En este artículo explicaremos en detalle cómo cuidar a Euonymus alatus y todas sus características.
Principales características
La principal ventaja que nos ofrece este arbusto es que el jardín luce un poco lúgubre en otoño por la caída de las hojas y el final de la floración. Hay algunas especies de plantas que florecen en otoño, pero no es tan común. Este arbusto Nos ofrece un color típico del otoño con tonos bastante agradables. Es un arbusto de hoja caduca y, a diferencia de otros arbustos más conocidos, no tiene verano para verse bien.
En un jardín nos gusta tener diferentes tipos de plantas y arbustos que den distintas tonalidades para que no todo salga del mismo color o algo muy monótono. El capó alado es perfecto para esto. Las especies más comunes en las que solemos fijarnos son aquellas cuya floración se caracteriza por una floración vigorosa.
Este arbusto es originario del este de Asia (principalmente Japón) y Alcanza una altura de dos metros y una anchura de tres metros. cuando las condiciones son ideales para su cuidado. Utiliza insectos para polinizar sus flores con unidades reproductoras hermafroditas. Sus hojas son de hoja caduca y, gracias a su fuerte color, son perfectas para decorar.
Como sabemos, en el otoño, las plantas de hoja caduca tienden a tener colores marrones, amarillentos e incluso rojizos que dan una sensación de nostalgia. Este arbusto tiene hojas intensamente rojas en otoño, por lo que se mezclan bien con otras especies de color pardusco o amarillo. Podemos tener esta combinación de colores otoñales en nuestro jardín.
descripción
En la parte inferior de las ramas que crecieron en el mismo año podemos encontrar algunas inflorescencias de cyymos. Están hechos de racimos muy pequeños con solo 3 o 5 flores hermafroditas. Estas flores son insignificantes y no aportan mucho aspecto estético. Son las hojas las que le dan color y decoración a tu jardín. La floración tiene lugar a finales de primavera y principios de verano. Sin embargo, según lo que hemos comentado, esto no es de esperar en absoluto.
El otoño es la época dorada para ellos Euonymus alatus. Aparte de que las hojas adquieren un color rojo, lo que favorece el contraste de color y nos recuerda cosas, los frutos también aparecen en este momento. La corteza del arbusto es bastante atractiva y la variedad más común es Euonymus alatus ‘Compactus’. Esto se debe a que se prefiere tener un arbusto de estilo bonsai que no ocupe tanto espacio en el jardín pero que tenga las funciones de contraste de color que necesitamos para la temporada de otoño.
Pertenece a la familia Celastraceae y, aunque no tan conocida, se debe a nuestras latitudes más bajas. Esta cresta alada es una de las pocas especies dentro de su género que puede vivir en climas templados ya que es originaria de Japón.
Euonymus alatus cuidado
Clima, exposición y riego
Este arbusto es resistente a numerosos fenómenos meteorológicos y las condiciones atmosféricas más adversas. Por tanto, es una muy buena opción para climas donde tenemos un clima más inestable con más frecuencia. Tolera las heladas invernales hasta -20 grados. Con este margen podrás vivir en nuestra península sin ningún problema ya que estas temperaturas nunca se producirán.
Por otro lado, también es resistente a las condiciones habituales en España como la sequía y el viento. Necesita luz solar directa, pero también puede crecer fácilmente en sombra parcial. Su crecimiento es bastante lento. Si queremos acelerarlo un poco, es necesario que esté expuesto a más luz solar en todo momento. De esta forma garantizamos un mejor desarrollo y no falta de nutrientes.
El calor del verano de nuestra península, especialmente en Andalucía, puede resultar un poco excesivo para la especie. Es mejor no tener los veranos tan calurosos y un poco más frescos.
En cuanto al riego, notamos que la sequía lo está aguantando bastante bien, por lo que no deberíamos preocuparnos indebidamente. Podemos plantarlo tanto en el jardín como en macetas grandes para la terraza. Para macetas, es más conveniente utilizar la variedad «compactus», que ocupa menos espacio.
Si la sembramos en el jardín, apenas necesita riego, y más si el clima llueve abundantemente. Si lo ponemos en macetas, es posible que necesite un poco de riego de vez en cuando.
Suelo, estiércol y poda
Otro beneficio del capó alado es que no es exigente con el tipo de suelo en el que crece. Todo lo que requiere es que tenga un buen drenaje. Es decir, no recogemos agua al regar. De lo contrario, las raíces pueden pudrirse y mataremos la planta. Es capaz de soportar suelos ácidos, neutros y alcalinos hasta cierto punto. El rango de pH es bastante amplio, por lo que no debemos preocuparnos.
Si nuestro suelo es más calizo, puede sufrir clorosis férrica, aunque puede crecer bien. Para paliar este problema, lo vamos a tratar con quelatos de hierro.
En cuanto a la poda, no es nada recomendable. Es tan atractivo y, naturalmente, hace su trabajo que no necesita mantenimiento. Cuando nos circuncidamos puede ser perjudicial ya que incluso los deforma. La poda debe realizarse en casos extremos en los que el viento lo derribe o se produce algún otro problema grave.
Espero que disfrute de su Euonymus alatus con esta información.